Entrada 178.
Dejando a su espalda la sombra del presente reflejada en el espejo,
Black Jack no profundizó más en sus pensamientos. Si Hamilton no quería que
fueran dañados el Tecno Medico y su vástago así sería, los motivos de la orden
no importaban. En este momento, el equipo a transportar si era algo que tenía
que decidir concienzudamente.
Desplegó sobre la cama todas sus pertenencias; un sinfín de material
diverso que cubría la mayoría de necesidades para un largo viaje. Por contra el
copado de enseres lo sobrecargarían en exceso para sus heridas.
Tras meditar unos instantes fue descartando entresijos y aparatología hasta
reducirlo a poco menos de la mitad: Un saco de dormir, un escáner de microondas
sin batería, prismáticos, municiones para un par de tiroteos o en su defecto
uno alargado y un pequeño kit de primeros auxilios enfocado a paliar hemorragias.
Eso junto a un surtido de latas para alimentarse poco más de cinco días era el
equipo seleccionado para la mochila.
Arma corta, Remington Sodom, un pequeño cuchillo, cantimplora y el zurrón;
con drogas para el hornillo, PDA y los mapas de la zona componían el resto del
equipaje.
Teniendo en cuenta la pesada armadura BH7 no era un set ligero, pero ya
había llegado al limite de descartes con recelo miró de reojo las granadas que
pensaba dejar atrás. << Ese maldito puerto de montaña me va a hacer
viajar casi desnudo >>.