Entrada 198.
Net-La tras
finalizar la escueta y banal charla se encogió de hombros y entró dentro del
taller mientras con una manda se resguardaba de la gélida noche asturiana.
Realmente le importaba bien poco el asunto de los paneles solares, sabía que el
coche no daría error. Corven había resultado muy eficaz en todo lo que metía
mano, pero quería poder juzgar el tono de voz. Shodan había estado callada
sobre el incidente de la tarde de eso no cabía duda, el tecno-médico continuaba
siendo comedido y educado.
Corven vio
retirarse a la egipcia y retomó el trabajo pero principalmente sus pensamientos.
Esta iba a ser una larga velada para tomar decisiones.
<<¿Hasta
dónde puedo confiar en la netrunner sin poner la vida Shodan y la mía propia en
delicada situación? >>
Tenía
demasiados esqueletos en el armario y dos frentes abiertos defendidos con
secretos: El de su hija era fácilmente ocultable, el conocimiento de su tumor
solo le generarían mal estar y no solucionaría nada al contárselo. Ese asunto
era el menos complejo de resolver, continuaría en silencio.