6 jun 2013




Entrada. 219

-Vibro-espada –dijo Corven –también llamada espada sónica, vaporweapon y en algunos lugares leyenda urbana; Una hoja mono filamento perforante de blindajes duros, pero cuando se conecta la vibración por sonido. Las historias que cuentan de ella dicen que es capaz de cortar a un cyborg pesado como si fuera papel y doy fe que el blindaje duro de ese cazador de recompensas que ha amortiguado tu disparo del 44, ni tan siquiera ha frenado el tajo. ¿Cuántas crees que se fabricaron pre botón rojo? 20, tal vez 30… quién lo sabe, sólo las grandes corporaciones tenían la tecnología para fabricarlas. En el pasado la podrías vender por millones. Hoy en día; no tiene precio.

-Me has recordado a un traficante de armas más que a un médico. –Señaló Net-La visiblemente sorprendida –Pero te equivocas en una cosa; todo en esta vida de mierda se puede vender, sólo hay que encontrar al comprador y acordar el trueque –encañonó a Corven –Si has de pensar en algo bonito o cerrar los ojos. Ahora es el momento…

-En el pecho, no quiero que Shodam cuando se despierte vea mis sesos esparcidos por el suelo. –Tras finalizar la frase escupió de manera despectiva en el suelo.

Net-La dudó un instante si decirle lo que tenía planeado con Shodam y que nunca se despertaría de su sueño. Pero no quiso atormentar a un buen hombre en sus últimos instantes de vida. No había necesidad para ello. Apartó ligeramente el cruce de miradas.

-Tranquilo, cuenta con ello y para cuando despierte yo estaré muy lejos, no quiero avivar una venganza sobre mí.



<< ¡Hija de la gran puta! –exclamó Corven en pensamientos ,- la va amatar. Necesito ganar tiempo como sea >> -¿Permitirás a un ex fumador darse unas caladas?


                                                            Ir a entrada 220